5 de junio de 2013

Los taxis y los omnibús
iban llenos de besos
(Ernesto Cardenal)

Te recuerdo, Amanda:
la calle mojada
las Vans amarillas
y los ojos gastados.

Esperas el semaforo.
Son veinte segundos.

Te recuerdo, Amanda:
la boca cerrada,
las manos vacías
y la calle llena de rostros ausentes.

Esperas el semaforo.
Son cinco segundos.


Y te fuiste.
Y
    te
        fuiste.


Y te fuiste 
sin haberme visto
sin haber sabido
lo que habría pasado,
lo que habrías vivido,
si me hubieses visto.

Te recuerdo, Amanda,
pero casi ya te olvido. 

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